Durante todo el año, pero especialmente en los meses calurosos debemos tomar a ensaladas a diario.
Vamos a intentar convencerte de porqué comer ensaladas frescas de verano: Son hidratantes, depuran, aportan vitalidad, bajas en calorías, ayudan al corazón, protegen la piel, favorecen la digestión, fuera anemias, son refrescantes y, además de que nunca repites, están riquísimas… ¿Pasamos a verlas?
ENSALADA DE ESPINACAS. El sabor agridulce de las fresas combina muy bien en las ensaladas de hoja verde.
ENSALADA CAMPERA. Una receta perfecta para tener preparada el día anterior y llevarla en el túper a cualquier sitio.
ENSALADA DE JAMÓN Y RABANITOS. Una ensalada que viene de maravilla como acompañamiento para un plato de carne o para una cena ligera.
TOMATES ALIÑAOS. Con pocos ingredientes tendremos un acompañamiento perfecto para cualquier plato y muy saludable 😉
ENSALADA CAPRESE. La Ensalada Caprese es una ensalada típica de Italia. La Caprese es la ensalada de verano por excelencia, que se sirve ya sea como aperitivo o como plato principal.
ENSALADA BARBATEÑA. Los salazones de atún de Barbate me parecen impresionantes y alegran cualquier plato.